El Señor hizo que los egipcios vieran con buenos ojos a los israelitas, así que les dieron todo lo que pedían. De este modo, los israelitas despojaron por completo a los egipcios.
y lo libró de todas sus desgracias. Le dio sabiduría para ganarse el favor del faraón, rey de Egipto, quien lo nombró gobernador del país y del palacio real.
El Señor hizo que los egipcios vieran con buenos ojos a los israelitas. Además, en todo Egipto Moisés mismo era altamente respetado por los funcionarios del faraón y por el pueblo.