»El día veinticuatro del mes primero, mientras me encontraba yo a la orilla del gran río Tigris,
El tercero se llamaba Tigris, que corría al este de Asiria. El cuarto era el Éufrates.
En ella me veía en la ciudad de Susa, en la provincia de Elam, junto al río Ulay.
En este tiempo, mientras el sacerdote Ezequiel, hijo de Buzí, estaba a orillas del río Quebar, en la tierra de los babilonios, el Señor le dirigió la palabra y su mano estaba sobre él.
»Yo, Daniel, vi ante mí a dos hombres. Uno de ellos estaba a una orilla del río; el otro, en la orilla opuesta.