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Referencias Cruzadas

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Apocalipsis 7:1

Biblia Nueva Versión Internacional 2022

Después de esto vi a cuatro ángeles en los cuatro ángulos de la tierra. Estaban allí de pie, deteniendo los cuatro vientos para que estos no soplaran sobre la tierra, el mar y los árboles.

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23 Referencias Cruzadas  

Y al sonido de la gran trompeta mandará a sus ángeles, y reunirán de los cuatro vientos a los elegidos, de un extremo al otro del cielo.

Daniel dijo: «Durante la noche tuve una visión. En ella aparecía el gran mar agitado por los cuatro vientos del cielo.

Voy a desatar contra Elam los cuatro vientos desde los cuatro extremos del cielo. Los voy a esparcir por los cuatro vientos, y no quedará nación alguna adonde no lleguen sus desterrados.

Y él enviará a sus ángeles para reunir de los cuatro vientos a los elegidos, desde los confines de la tierra hasta los confines del cielo.

El macho cabrío cobró gran fuerza, pero en el momento de su mayor grandeza se le rompió el gran cuerno. En su lugar brotaron cuatro grandes cuernos que se alzaron contra los cuatro vientos del cielo.

Entonces el Señor me dijo: «Profetiza, hijo de hombre; profetiza al espíritu y dile: “Esto ordena el Señor y Dios: ‘Espíritu, ven de los cuatro vientos y sopla sobre estos muertos y vivirán’ ”».

«Hijo de hombre, así dice el Señor y Dios al pueblo de Israel: »¡Te llegó la hora! Ha llegado el fin sobre los cuatro extremos de la tierra.

Contendió con él con guerra y destierro; lo expulsó con su soplo violento al soplar el viento del este.

A este ángel que tenía la trompeta, la voz le dijo: «Suelta a los cuatro ángeles que están atados a la orilla del gran río Éufrates».

Izará una bandera para las naciones, reunirá a los desterrados de Israel y de los cuatro puntos cardinales juntará al pueblo esparcido de Judá.

«¡No hagan daño ni a la tierra ni al mar ni a los árboles, hasta que hayamos puesto un sello en la frente de los siervos de nuestro Dios!».

Se les ordenó que no dañaran la hierba de la tierra, ni ninguna planta ni ningún árbol, sino solo a las personas que no llevaran en la frente el sello de Dios.

Alcé de nuevo la vista y vi ante mí cuatro carros de guerra que salían de entre dos montañas, las cuales eran de bronce.

Pero el Señor lanzó sobre el mar un fuerte viento y se desencadenó una tormenta tan violenta que el barco amenazaba con hacerse pedazos.

Y oí como una voz en medio de los cuatro seres vivientes que decía: «Un kilogramo de trigo o tres kilogramos de cebada por el salario de un día; pero no dañes el aceite ni el vino».

Yo, el Señor, soy su guardián; todo el tiempo riego mi viña. Día y noche cuido de ella para que nadie le haga daño.

Pero tan pronto como surja su imperio, se quebrará y se esparcirá hacia los cuatro vientos del cielo. Este imperio no será para sus descendientes, ni tendrá el poder que tuvo bajo su gobierno, porque Dios lo dividirá y se lo entregará a otros.

El ángel me respondió: «Estos son los cuatro espíritus del cielo que salen después de haberse presentado ante el Señor de toda la tierra.

El primero tocó su trompeta y fueron arrojados sobre la tierra granizo y fuego mezclados con sangre. Y quemó la tercera parte de la tierra, la tercera parte de los árboles y toda la hierba verde.

y saldrá para engañar a las naciones que están en los cuatro ángulos de la tierra —a Gog y a Magog—, a fin de reunirlas para la batalla. Su número será como el de las arenas del mar.




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