Apocalipsis 19:7

Biblia Nueva Versión Internacional 2022

¡Alegrémonos y regocijémonos y démosle gloria! Ya ha llegado el día de las bodas del Cordero. Su novia se ha preparado

Referencias Cruzadas

Apocalipsis 21:9

Se acercó uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas con las últimas siete plagas. Me dijo: «Ven, que te voy a presentar a la novia, la esposa del Cordero».

Apocalipsis 21:2

Vi además la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que bajaba del cielo, procedente de Dios, preparada como una novia hermosamente vestida para su prometido.

2 Corintios 11:2

El celo que siento por ustedes proviene de Dios, pues los tengo prometidos a un solo esposo, que es Cristo, para presentárselos como una virgen pura.

Mateo 22:2

«El reino de los cielos es como un rey que preparó un banquete de bodas para su hijo.

Apocalipsis 19:9

El ángel me dijo: «Escribe: “¡Dichosos los que han sido convidados a la cena de las bodas del Cordero!”». Y añadió: «Estas son las palabras verdaderas de Dios».

Efesios 5:32

Esto es un misterio profundo; yo me refiero a Cristo y a la iglesia.

Juan 3:29

El que se casa con la novia es el novio. Y el amigo del novio, que está a su lado y lo escucha, se llena de alegría cuando oye la voz del novio. Esa es la alegría que me inunda.

Isaías 62:5

Como un joven que se casa con una joven, así el que te edifica se casará contigo; como un novio que se regocija por su novia, así tu Dios se regocijará por ti.

Efesios 5:23

Porque el esposo es cabeza de su esposa, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y él su Salvador.

Isaías 66:10

«Mas alégrense con Jerusalén y regocíjense por ella, todos los que la aman; salten con ella de alegría todos los que por ella se conduelen.

Lucas 12:36

Pórtense como siervos que esperan a que regrese su señor de un banquete de bodas, para abrirle la puerta tan pronto como él llegue y toque.

Zacarías 9:9

¡Alégrate mucho, hija de Sión! ¡Grita de alegría, hija de Jerusalén! Mira, tu rey viene hacia ti, justo, victorioso y humilde. Viene montado en un burro, en un burrito, cría de asna.

Isaías 52:1

¡Despierta, Sión, despierta! ¡Revístete de poder! Jerusalén, ciudad santa, ponte tus vestidos de gala, pues los incircuncisos e impuros no volverán a entrar en ti.

Cantares 3:11

¡Salgan, doncellas de Sión! ¡Contemplen al rey Salomón! ¡Lleva puesta la corona que le ciñó su madre el día en que contrajo nupcias, el día en que se alegró su corazón!

Filipenses 3:3

Porque la circuncisión somos nosotros, los que por medio del Espíritu de Dios adoramos, nos enorgullecemos en Cristo Jesús y no ponemos nuestra confianza en esfuerzos humanos.

Salmos 9:14

para que en las puertas de la hija de Sión proclame tus alabanzas y me regocije en tu salvación.

1 Samuel 2:1

Ana elevó esta oración: «Mi corazón se alegra en el Señor; en él radica mi poder. Puedo celebrar su salvación y burlarme de mis enemigos.

Proverbios 29:2

Cuando los justos prosperan, el pueblo se alegra; cuando los impíos gobiernan, el pueblo gime.

Salmos 107:42

Los rectos lo verán y se alegrarán, pero todos los malvados serán acallados.

Salmos 48:11

El monte Sión se alegra, las aldeas de Judá se regocijan por causa de tus juicios.

Deuteronomio 32:43

Alégrense, naciones, con el pueblo de Dios; él vengará la sangre de sus siervos. ¡Sí! Dios se vengará de sus enemigos, y perdonará a su tierra y a su pueblo.

Isaías 66:14

Cuando ustedes vean esto, se regocijará su corazón, y su cuerpo florecerá como la hierba. El Señor dará a conocer su poder entre sus siervos y su furor entre sus enemigos.

Mateo 1:20

Pero cuando él estaba considerando hacerlo, se le apareció en sueños un ángel del Señor y le dijo: «José, hijo de David, no temas recibir a María por esposa, porque ella ha concebido por el poder del Espíritu Santo.

Apocalipsis 11:13

En ese mismo instante se produjo un violento terremoto y se derrumbó la décima parte de la ciudad. Perecieron siete mil personas, pero los sobrevivientes, llenos de temor, dieron gloria al Dios del cielo.