Yo lo he elegido para que instruya a sus hijos y a su familia, a fin de que se mantengan en el camino del Señor y pongan en práctica lo que es justo y recto. Así el Señor cumplirá lo que ha prometido».
Para nosotros, el motivo de satisfacción es el testimonio de nuestra conciencia: Nos hemos comportado en el mundo, y especialmente entre ustedes, con la santidad y sinceridad que vienen de Dios. Nuestra conducta no se ha ajustado a la sabiduría humana, sino a la gracia de Dios.
Aquí me tienen. Pueden acusarme en la presencia del Señor y de su ungido. ¿A quién le he robado un buey o un asno? ¿A quién he defraudado? ¿A quién he oprimido? ¿Por quién me he dejado sobornar? Acúsenme y pagaré lo que corresponda.
Entonces Moisés, sumamente enojado, dijo al Señor: —No aceptes la ofrenda que te traigan, que yo de ellos no he tomado ni siquiera un asno ni les he hecho ningún daño.
»En cuanto a ti, si me sigues con integridad y honestidad, como lo hizo tu padre David, y me obedeces en todo lo que yo te ordene y cumples mis estatutos y leyes,