Ben Guéber, en Ramot de Galaad (los poblados de Yaír, hijo de Manasés, en Galaad entraban en su jurisdicción, así como también el distrito de Argob en Basán y sus sesenta grandes ciudades, amuralladas y con cerrojos de bronce);
Un día, el profeta Eliseo llamó a un miembro de la comunidad de los profetas. «Arréglate la ropa para viajar —le ordenó—. Toma este frasco de aceite y ve a Ramot de Galaad.
Cuando llegó, encontró reunidos a los oficiales del ejército y les dijo: —Tengo un mensaje para el comandante. —¿Para cuál de todos nosotros? —preguntó Jehú. —Para usted, comandante —respondió.