»El plan que yo propongo es el siguiente: Convoque usted a todos los israelitas que hay, desde Dan hasta Berseba. Son tan numerosos como la arena a la orilla del mar, y usted mismo debe dirigirlos en la batalla.
Entonces el Señor envió a Yerubaal, Barac, Jefté y Samuel, y los libró a ustedes del poder de los enemigos que los rodeaban, para que vivieran seguros.
Durante el reinado de Salomón, todos los habitantes de Judá y de Israel, desde Dan hasta Berseba, vivieron seguros sentados debajo de su propia vid y de su propia higuera.