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Referencias Cruzadas

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1 Samuel 18:17

Biblia Nueva Versión Internacional 2022

Un día Saúl dijo a David: —Aquí tienes a Merab, mi hija mayor. Te la entrego por esposa, con la condición de que me sirvas con valentía, peleando las batallas del Señor. Saúl pensaba: «Será mejor que no muera por mi mano, sino a mano de los filisteos».

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22 Referencias Cruzadas  

»Yo le ruego que perdone el atrevimiento de esta sierva. Ciertamente, el Señor le dará a usted una dinastía que se mantendrá firme, y nunca nadie podrá hacerle a usted ningún daño, pues usted pelea las batallas del Señor.

Pero Saúl insistió: —Díganle a David: “Lo único que el rey quiere es vengarse de sus enemigos, y como dote por su hija pide cien prepucios de filisteos”. En realidad, lo que Saúl quería era que David cayera en manos de los filisteos.

Algunos decían: «¿Ven a ese hombre que sale a desafiar a Israel? A quien lo venza y lo mate, el rey lo colmará de riquezas. Además, le dará su hija como esposa y su familia quedará exenta de impuestos aquí en Israel».

y pensó: «Se la entregaré a él, como una trampa para que caiga en manos de los filisteos». Así que volvió a decirle a David: —Ahora sí vas a ser mi yerno.

Todos los que están aquí reconocerán que el Señor salva sin necesidad de espada ni de lanza. La batalla es del Señor y él los entregará a ustedes en nuestras manos.

Su palabra es blanda como la mantequilla, pero su corazón es belicoso. Sus palabras son más suaves que el aceite, pero no son sino espadas desenvainadas.

No hacen sino mentirse unos a otros; sus labios son aduladores e hipócritas.

¿Por qué, entonces, despreciaste la palabra del Señor haciendo lo que le desagrada? ¡Asesinaste a Urías el hitita para apoderarte de su esposa! ¡Lo mataste con la espada de los amonitas!

La carta decía: «Pongan a Urías al frente de la batalla, donde la lucha sea más dura. Luego déjenlo solo para que lo hieran y lo maten».

Los primeros en ejecutar el castigo serán los testigos y luego todo el pueblo. Así erradicarás el mal que esté en medio de ti.

—Si los gaditas y los rubenitas, armados para la guerra, cruzan el Jordán con ustedes y conquistan el país, como el Señor quiere, ustedes les entregarán como heredad la tierra de Galaad.

pero sus siervos cruzarán con sus armas el Jordán para pelear a la vanguardia del Señor, tal como usted lo ha ordenado.

Moisés contestó: —Si están dispuestos a hacerlo así, delante del Señor tomen las armas y marchen al combate.

Por eso puede leerse en el libro de las guerras del Señor: «…pasamos por Vaheb, en Sufá, por los valles y el Arnón;

Saúl tuvo tres hijos: Jonatán, Isví y Malquisúa. También tuvo dos hijas: la mayor se llamaba Merab y la menor, Mical.

Si este siervo suyo ha matado leones y osos, lo mismo puede hacer con ese filisteo incircunciso, porque está desafiando al ejército del Dios viviente.

cuando David fue con sus soldados y mató a doscientos filisteos, cuyos prepucios entregó al rey para convertirse en su yerno. Así fue como Saúl le dio la mano de su hija Mical.

Después de llegar a Siclag, David envió parte del botín a sus amigos que eran jefes de Judá, con este mensaje: «Aquí tienen un regalo del botín que rescatamos de los enemigos del Señor».

Sucedió que al entrar el arca del Señor a la Ciudad de David, la hija de Saúl, Mical, se asomó a la ventana y, cuando vio que el rey David estaba saltando y bailando delante del Señor, sintió por él un profundo desprecio.

El que odia se esconde tras sus palabras, pero en lo íntimo alberga engaño.

No le creas, aunque te hable con dulzura, porque su corazón está lleno de siete abominaciones.

Tal vez disimule con engaños su odio, pero en la asamblea se descubrirá su maldad.




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