el de los jesronitas, que procedía de Jesrón, y el de los carmitas, que procedía de Carmí.
Hay un tiempo para matar y un tiempo para curar; un tiempo para destruir y un tiempo para construir.
A vuestros hijos pequeños, de quienes dijisteis que serían botín del enemigo, sí les permitiré entrar; ellos conocerán la tierra que vosotros habéis rechazado.
Descendientes de Farés eran: el clan de los jesronitas, que procedía de Jesrón; y el de los jamulitas, que procedía de Jamul.
Descendientes de Rubén, el primogénito de Israel, eran: el clan de los enoquitas, que procedía de Enoc; el de los faluitas, que procedía de Falú;
Estos eran los clanes de los rubenitas; el total de personas registradas fue de cuarenta y tres mil setecientas treinta.