El Señor se dirigió a Moisés y le dijo:
un castigo en el que murieron veinticuatro mil.
—Finés, hijo de Eleazar y nieto del sacerdote Aarón, ha apartado de los israelitas mi furor, saliendo en mi defensa en medio de ellos y evitando así que mi furor los aniquilara.
Esto se le contó en su haber de padres a hijos para siempre.