Números 24:1

La Palabra (versión española)

Al ver Balaán que lo que agradaba al Señor era que él bendijera a Israel, no fue, como las otras veces, en busca de presagios, sino que dirigió su mirada hacia el desierto.

Referencias Cruzadas

Números 22:13

Balaán se levantó por la mañana y dijo a los dignatarios de Balac: —Retornad a vuestra tierra, porque el Señor no me deja ir con vosotros.

Números 22:7

Los ancianos de Moab y los ancianos de Madián partieron llevando consigo el pago por el vaticinio. Llegaron adonde estaba Balaán y le dieron el mensaje de Balac.

Números 23:15

Entonces Balaán dijo a Balac: —Permanece aquí junto a tu holocausto mientras yo voy a encontrarme con Dios.

Números 23:20

Mi orden era bendecir; si él ha bendecido, yo no puedo revocarlo.

Números 23:23

No sirven conjuros contra Jacob, ni adivinación contra Israel. A su tiempo Jacob e Israel escucharán las maravillas hechas por Dios.

Números 23:28

Balac llevó a Balaán a la cumbre de Peor, desde donde se domina el desierto.

Números 23:3

Luego Balaán dijo a Balac: —Quédate junto a tu holocausto mientras yo me retiro por si el Señor quiere manifestárseme; si es así, te comunicaré cualquiera cosa que me revele. Se fue Balaán hacia una colina sin vegetación

Números 23:30

Así lo hizo Balac, tal como Balaán le dijo, ofreciendo un becerro y un carnero en cada altar.

Números 31:16

Fueron precisamente ellas las que, por consejo de Balaán, incitaron a los israelitas a rebelarse contra el Señor dando culto a Baal-Peor, lo que provocó que el castigo se abatiera sobre la comunidad del Señor.

Apocalipsis 2:14

Pero tengo algunas quejas contra ti: y es que toleras ahí a los que siguen las enseñanzas de Balaán, el que aconsejó a Balac que indujese a los israelitas a comer de lo ofrecido a los ídolos y a entregarse a la lujuria.

1 Samuel 24:20

Cuando alguien encuentra a su enemigo, no lo deja marchar por las buenas. ¡Que el Señor te recompense por esto que acabas de hacer hoy conmigo!

1 Samuel 26:2

Entonces Saúl se puso en camino y bajó al desierto de Zif con tres mil hombres de lo más selecto de Israel para buscar allí a David.

1 Samuel 26:25

Y Saúl dijo a David: —¡Bendito seas, David, hijo mío! Tendrás éxito en todas tus empresas. Luego David siguió su camino y Saúl regresó a casa.