Balaán respondió a Dios: —Balac, hijo de Zipor, rey de Moab, me ha enviado este mensaje:
«Un pueblo ha salido de Egipto y cubre ya la faz de la tierra. Ven, pues, y maldice a ese pueblo de mi parte; quizá entonces yo pueda derrotarlo y expulsarlo de mi territorio».
Y tuvo Balaán una visión en la que Dios le preguntó: —¿Qué es lo que quieren esos hombres de ti?
Entre los muertos estaban también los cinco reyes de Madián: Eví, Requén, Zur, Jur y Rebá. También pasaron a espada a Balaán, hijo de Beor.