De la tribu de Aser: Setur, hijo de Micael.
Y el Señor se dirigió a Moisés y le dijo:
De la tribu de Dan: Amiel, hijo de Guemalí.
De la tribu de Neftalí, Najbi, hijo de Vapsí.
Entonces toda la comunidad comenzó a lamentarse a gritos y el pueblo pasó toda la noche llorando.
Así pues, dejamos el Horeb y recorrimos todo ese inmenso y espantoso desierto que habéis visto, camino de las montañas de los amorreos, hasta que llegamos a Cadés Barnea, como el Señor nuestro Dios nos había mandado.