Te ruego no quede ella como el aborto que, al salir del vientre de su madre, nace ya medio consumido.
Como aborto ignorado, no existiría; como criatura que no llega a ver la luz.
que sean cual babosa que al andar se deshace, como aborto de mujer que no pudo ver el sol;
Y dijo Aarón a Moisés: —¡Ah! señor mío, no nos tengas en cuenta este pecado que neciamente hemos cometido.
Entonces Moisés suplicó al Señor, diciéndole: —¡Te ruego, oh Dios, que la sanes!
Finalmente, como si se tratara de un hijo nacido fuera de tiempo, se me apareció también a mí,
Y muertos estabais a causa de vuestros delitos y de vuestra condición de paganos. Pero ahora, Dios os ha vuelto a la vida con Cristo y nos ha perdonado todos nuestros pecados.
En cambio, la de conducta licenciosa, aunque parezca viva, está muerta.