Esto es lo que comentaban entre sí los que honraban al Señor. Entonces el Señor prestó atención, escuchó e hizo que se escribiera en su presencia un memorial en el que se consignara a todos los que respetan y honran su nombre.
—Vuelve a tu casa y cuenta todo lo que Dios ha hecho contigo. El hombre se marchó y fue proclamando por toda la ciudad lo que Jesús había hecho con él.