Luego los ángeles volvieron al cielo, y los pastores se decían unos a otros: —Vamos a Belén, a ver eso que ha sucedido y que el Señor nos ha dado a conocer.
La reina del Sur se levantará en el día del juicio, al mismo tiempo que toda esta gente, y la condenará, porque esa reina vino desde tierras lejanas a escuchar la sabiduría de Salomón, ¡y aquí hay algo más importante que Salomón!