Quisiera cosechar algo —oráculo del Señor—, pero no hay uvas en la cepa, tampoco higos en la higuera; tienen las hojas marchitas. ¡Pues los convertiré en bosque pelado!
No me elegisteis vosotros a mí; fui yo quien os elegí a vosotros. Y os he destinado para que os pongáis en camino y deis fruto abundante y duradero. Así, el Padre os dará todo lo que le pidáis en mi nombre.