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Referencias Cruzadas

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Jueces 7:9

La Palabra (versión española)

Aquella noche el Señor dijo a Gedeón: —¡Ánimo!, baja al campamento, porque lo he puesto en tus manos.

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23 Referencias Cruzadas  

Pero no tendréis que luchar esta vez. Deteneos y quedaos quietos y veréis la victoria que os depara el Señor. Judá y Jerusalén, no temáis ni os acobardéis. Salid mañana a su encuentro, que el Señor estará con vosotros.

entre pesadillas y visiones nocturnas, cuando el sopor rinde a los humanos,

Estaba pensando en esto, cuando un ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: —José, descendiente de David, no tengas reparo en convivir con María, tu esposa, pues el hijo que ha concebido es por la acción del Espíritu Santo.

Cuando se marcharon los sabios, un ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: —Levántate, toma al niño y a su madre, huye con ellos a Egipto y quédate allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo.

Pues anoche se me apareció un ángel del Dios a quien pertenezco y sirvo,

y el Señor le dijo: —No les tengas miedo, porque los he entregado en tus manos; ninguno de ellos podrá hacerte frente.

El Señor dijo entonces a Josué: —No les tengas miedo, porque mañana, a esta misma hora, haré que perezcan todos ellos ante Israel; tú desjarretarás sus caballos y quemarás sus carros.

Le dijeron a Josué: —El Señor ha puesto todo el país en nuestras manos; todos sus habitantes están ya temblando ante nosotros.

y Finés, hijo de Eleazar, hijo de Aarón, estaba entonces a su servicio. Preguntaron: —¿He de volver a combatir contra mi hermano Benjamín o debo desistir? El Señor respondió: —Subid, porque mañana lo entregaré en vuestras manos.

El espíritu del Señor lo invadió, se constituyó en juez de Israel y salió a la guerra. Y el Señor puso en sus manos a Cusán Risatáin, rey de Edom, y triunfó sobre Cusán Risatáin.

y les dijo: —Seguidme, porque el Señor os ha entregado a Moab, vuestro enemigo. Fueron con él, cortaron a Moab los vados del Jordán y no dejaron pasar a nadie.

Pero, si te da miedo bajar solo al campamento, que te acompañe tu criado Purá,

Los elegidos se pertrecharon oportunamente y tomaron sus trompetas de guerra. A los restantes israelitas, Gedeón los mandó a su casa y se quedó solo con los trescientos hombres. Madián había acampado abajo, en el valle.

Jonatán le dijo: —Vamos a cruzar en dirección a esos hombres, para que nos vean.

David volvió a consultar al Señor, y el Señor le respondió: —Marcha hacia Queilá, porque voy a poner a los filisteos en tus manos.




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