Juan 9:31

La Palabra (versión española)

Todo el mundo sabe que Dios no escucha a los pecadores; en cambio, escucha a todo aquel que lo honra y cumple su voluntad.

Referencias Cruzadas

Génesis 19:29

Así, cuando Dios destruyó las ciudades de la llanura, arrasando las ciudades donde había vivido Lot, se acordó de Abrahán y libró a Lot de la catástrofe.

Génesis 20:7

Pero ahora devuélvele la mujer a ese hombre. Él es un profeta, y va a interceder en favor tuyo para que salves tu vida. Pero, si no se la devuelves, ten por seguro que tú y los tuyos moriréis.

Job 35:12

Algunos protestan, pero no responde; el orgullo de los malvados tiene la culpa.

Job 35:13

Dios no escucha falsedades, el Todopoderoso no hace ni caso.

Job 42:8

Así que tomad siete novillos y siete carneros, id donde está mi siervo Job y ofrecedlos por vosotros en holocausto. Mi siervo Job intercederá por vosotros, yo le haré caso y no os trataré como merece vuestra audacia, por no haber hablado de mí como hay que hablar, al contrario de como lo ha hecho mi siervo Job.

Salmos 106:23

Pensaba el Señor exterminarlos, pero Moisés, su elegido, intercedió delante de él para calmar su furia destructora.

Salmos 143:10

Enséñame a hacer tu voluntad, que tú eres mi Dios; que tu buen espíritu me lleve por una tierra llana.

Salmos 145:19

Él cumple el deseo de sus fieles, escucha su grito y los salva.

Salmos 18:41

Piden auxilio y no hay quien los salve, claman a Dios y no les responde.

Salmos 40:8

Quiero hacer tu voluntad, tu ley llevo en mis entrañas».

Salmos 99:6

De sus sacerdotes, Moisés y Aarón; de los que invocaban su nombre, Samuel: ellos llamaban al Señor y él les respondía.

Proverbios 15:29

El Señor está lejos de los malvados y escucha la oración de los justos.

Proverbios 21:13

Quien cierra su oído a los gritos del pobre no obtendrá respuesta cuando clame.

Proverbios 28:9

Quien cierra su oído para no oír la ley verá su oración aborrecida.

Isaías 1:15

Cuando tendéis las manos suplicantes, aparto mi vista de vosotros; por más que aumentéis las oraciones, no pienso darles oído; vuestras manos están llenas de sangre.

Isaías 58:9

Entonces llamarás al Señor y responderá, pedirás socorro y dirá: «Aquí estoy». Si apartas los cepos de en medio de ti, si no delatas acusando en falso;

Jeremías 11:11

Por eso, así dice el Señor: —Voy a traerles una desgracia de la que no podrán escapar; me llamarán a gritos, pero no pienso escucharlos.

Jeremías 14:12

Aunque ayunen, no pienso escuchar sus gritos; y, aunque ofrezcan holocaustos y sacrificios, no voy a complacerme en ellos. Los pienso aniquilar mediante la espada, el hambre y la peste.

Jeremías 15:1

Me dijo el Señor: —Aunque se presentaran ante mí Moisés y Samuel, no me sentiría bien dispuesto hacia este pueblo. Échalos de mi presencia y que salgan.

Ezequiel 8:18

Pues también yo actuaré con cólera; no pienso compadecerme ni perdonarlos. Me llamarán a gritos, pero no les prestaré atención.

Miqueas 3:4

cuando griten al Señor, no tendrán respuesta alguna. El Señor les ocultará su rostro a causa de sus malas acciones.

Zacarías 7:13

Y así como el Señor llamó y ellos no escucharon, así yo —dice el Señor del universo— tampoco los escuché cuando me invocaron,

Juan 11:22

Pero aun así, yo sé que todo lo que pidas a Dios, él te lo concederá.

Juan 15:16

No me elegisteis vosotros a mí; fui yo quien os elegí a vosotros. Y os he destinado para que os pongáis en camino y deis fruto abundante y duradero. Así, el Padre os dará todo lo que le pidáis en mi nombre.

Juan 4:34

Jesús les explicó: —Mi alimento es hacer la voluntad del que me ha enviado y llevar a cabo sus planes.

Juan 7:17

El que está dispuesto a hacer la voluntad del que me ha enviado, podrá comprobar si lo que yo enseño es cosa de Dios o si hablo por cuenta propia.

Juan 9:30

Él contestó: —¡Eso es lo verdaderamente sorprendente! Resulta que a mí me ha dado la vista, y vosotros ni siquiera sabéis de dónde es.

Juan 9:32

Jamás se ha oído decir de alguien que haya dado la vista a un ciego de nacimiento.

Deuteronomio 1:45

De vuelta llorasteis ante el Señor, pero no os escuchó ni os prestó atención.

Hebreos 10:7

Entonces dije: Aquí vengo yo, oh Dios, para hacer tu voluntad, como está escrito acerca de mí en un título del libro.