Biblia Todo Logo
Referencias Cruzadas

- Anuncios -




Juan 8:28

La Palabra (versión española)

así que Jesús añadió: —Cuando levantéis en alto al Hijo del hombre, entonces reconoceréis que «yo soy» y que no hago nada por mi propia cuenta; lo que aprendí del Padre, eso enseño.

Ver Capítulo Copiar

28 Referencias Cruzadas  

Dios dijo a Moisés: —Soy el que soy. Y añadió: —Esto responderás a los israelitas: «Yo soy» me envía a vosotros.

Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: «Yo soy el Mesías», y engañarán a mucha gente.

Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: «Yo soy», y engañarán a mucha gente.

Jesús contestó: —Tened cuidado, no os dejéis engañar. Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: «Yo soy» o «El momento ha llegado». No les hagáis caso.

Yo sé que me escuchas siempre; si me expreso así, es por los que están aquí, para que crean que tú me has enviado.

Os digo estas cosas ahora, antes que sucedan, para que, cuando sucedan, creáis que «yo soy».

el camino hacia la salvación está en que yo me voy al Padre y ya no me veréis;

Y es que tenía que cumplirse lo que Jesús había anunciado sobre la clase de muerte que iba a sufrir.

Allí lo crucificaron, y con él crucificaron también a otros dos: uno a cada lado y Jesús en medio.

Te aseguro que nosotros hablamos de lo que sabemos y damos testimonio de lo que hemos visto; con todo, vosotros rechazáis nuestro testimonio.

Lo mismo que Moisés levantó la serpiente de bronce en el desierto, el Hijo del hombre tiene que ser levantado en alto,

Jesús, entonces, le manifiesta: —El Mesías soy yo, el mismo que está hablando contigo.

Jesús, entonces, se dirigió a ellos diciendo: —Yo os aseguro que el Hijo no puede hacer nada por su propia cuenta; él hace únicamente lo que ve hacer al Padre. Lo que hace el Padre, eso hace también el Hijo.

Yo no puedo hacer nada por mi propia cuenta. Conforme el Padre me dicta, así juzgo. Mi juicio es justo, porque no pretendo actuar según mis deseos, sino según los deseos del que me ha enviado.

Porque yo he bajado del cielo, no para hacer lo que yo deseo, sino lo que desea el que me ha enviado.

Por eso os he dicho que moriréis en vuestros pecados. Porque si no creéis que «yo soy», moriréis en vuestros pecados.

Ellos no cayeron en la cuenta de que les estaba hablando del Padre;

Jesús les respondió: —Os aseguro que antes de que Abrahán naciera, existo yo.

Los que aceptaron con agrado la invitación se bautizaron, y aquel día se unieron a los apóstoles alrededor de tres mil personas.

Pero muchos de los que habían escuchado el discurso de Pedro abrazaron la fe, por lo que el número de creyentes varones alcanzó la cifra de unos cinco mil.

y manifestado, en virtud de su resurrección de entre los muertos, como Hijo poderoso de Dios por el Espíritu de santidad. Me refiero a Jesucristo, Señor nuestro,

Por eso yo suscitaré entre sus hermanos un profeta como tú; pondré mis palabras en su boca, y él les comunicará todo lo que yo le mande.




Síguenos en:

Anuncios


Anuncios