Juan 4:46

La Palabra (versión española)

Jesús visitó de nuevo Caná de Galilea, donde había convertido el agua en vino. Se encontraba allí un oficial de la corte que tenía el hijo enfermo en Cafarnaún.

Referencias Cruzadas

Salmos 50:15

Invócame en tiempo de angustia, yo te salvaré y tú me darás gloria».

Salmos 78:34

Si los hacía morir lo buscaban, se arrepentían dirigiéndose a él;

Oseas 5:15

Me iré, volveré a mi morada, hasta que ellos me busquen, reconociendo su culpa. En su angustia me buscarán.

Mateo 15:22

En esto, una mujer cananea que vivía por aquellos lugares vino a su encuentro gritando: —¡Señor, Hijo de David, ten compasión de mí! Mi hija está poseída por un demonio que la atormenta terriblemente.

Mateo 4:13

Pero no fue a Nazaret sino que fijó su residencia en Cafarnaún, junto al lago, en los términos de Zabulón y Neftalí,

Mateo 9:18

Mientras Jesús les estaba diciendo estas cosas, se le acercó un dignatario que, arrodillándose delante de él, le dijo: —Mi hija acaba de morir; pero si tú vienes y pones tu mano sobre ella, volverá a vivir.

Lucas 4:23

Jesús les dijo: —Sin duda, me aplicaréis este refrán: «Médico, cúrate a ti mismo. Haz, pues, aquí en tu propia tierra, todo lo que, según hemos oído decir, has hecho en Cafarnaún».

Lucas 7:2

El asistente de un oficial del ejército romano, a quien este último estimaba mucho, estaba enfermo y a punto de morir.

Lucas 8:42

porque su única hija, de unos doce años de edad, estaba muriéndose. Mientras Jesús se dirigía allá, la gente se apiñaba a su alrededor.

Juan 2:12

Después de esto, bajó a Cafarnaún acompañado por su madre, sus hermanos y sus discípulos. Y permanecieron allí unos cuantos días.

Juan 21:2

estaban juntos Simón Pedro, Tomás «el Mellizo», Natanael el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos.

Josué 19:28

Abdón, Rejob, Jamón, Caná y Sidón la Grande.