Juan 21:7

La Palabra (versión española)

El discípulo a quien Jesús tanto quería dijo entonces a Pedro: —¡Es el Señor! Al oír Simón Pedro que era el Señor, se puso la túnica (pues estaba solo con la ropa de pescar) y se lanzó al agua.

Referencias Cruzadas

Salmos 118:23

Del Señor viene todo esto y nos parece admirable.

Cantares 8:7

No podrán los océanos apagar el amor, ni los ríos anegarlo. Para el que quiera comprar el amor con todas sus riquezas, el más profundo desprecio.

Marcos 11:3

Y si alguien os pregunta por qué hacéis eso, contestadle que el Señor lo necesita y que enseguida lo devolverá.

Lucas 12:35

Estad preparados y mantened vuestras lámparas encendidas.

Lucas 2:11

En la ciudad de David os ha nacido hoy un Salvador, que es el Mesías, el Señor.

Lucas 7:47

Por eso te digo que, si demuestra tanto amor, es porque le han sido perdonados sus muchos pecados. A quien poco se le perdona, poco amor manifiesta.

Juan 13:23

Uno de ellos, el discípulo a quien Jesús tanto quería, estaba recostado al lado de Jesús.

Juan 19:26

Jesús, al ver a su madre y, junto a ella, al discípulo a quien tanto quería, dijo a su madre: —Mujer, ahí tienes a tu hijo.

Juan 20:2

Volvió entonces corriendo adonde estaban Pedro y el otro discípulo a quien Jesús tanto quería y les dijo: —Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto.

Juan 20:20

Dicho lo cual les enseñó las manos y el costado. Los discípulos se llenaron de alegría al ver al Señor.

Juan 20:28

Tomás contestó: —¡Señor mío y Dios mío!

Juan 21:20

Pedro se volvió y vio que detrás de ellos venía el discípulo a quien Jesús tanto quería, el mismo que en la cena se había recostado sobre el pecho de Jesús y le había preguntado: «Señor, ¿quién es el que va a traicionarte?».

Juan 21:24

Este discípulo es el mismo que da testimonio de todas estas cosas y las ha escrito. Y nosotros sabemos que dice la verdad.

Juan 21:8

Los otros discípulos, como la distancia que los separaba de tierra era solo de unos cien metros, llegaron a la orilla en la barca, arrastrando la red llena de peces.

Hechos 10:36

Fue Dios quien dirigió su mensaje a los israelitas y les anunció la buena noticia de la paz por medio de Jesucristo, que es el Señor de todos.

Hechos 2:36

Por consiguiente, sepa con seguridad todo Israel que Dios ha constituido Señor y Mesías a este mismo Jesús a quien vosotros habéis crucificado.

1 Corintios 15:47

El primer ser humano procede de la tierra, y es terreno; el segundo viene del cielo.

2 Corintios 5:14

En todo caso, es el amor de Cristo el que nos apremia, al pensar que, si uno murió por todos, todos en cierto modo han muerto.

Santiago 2:1

Hermanos míos, que vuestra fe en Jesucristo glorificado no se mezcle con favoritismos.