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Referencias Cruzadas

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Juan 2:2

La Palabra (versión española)

y lo estaban también Jesús y sus discípulos.

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30 Referencias Cruzadas  

No disputará con nadie, no andará dando gritos, ni se oirá su voz por las calles.

Y el rey les dirá: «Os aseguro que todo lo que hayáis hecho en favor del más pequeño de mis hermanos, a mí me lo habéis hecho».

Y él les dirá: «Os aseguro que cuanto no hicisteis en favor de estos más pequeños, tampoco conmigo lo hicisteis».

Después de esto, bajó a Cafarnaún acompañado por su madre, sus hermanos y sus discípulos. Y permanecieron allí unos cuantos días.

Al verlo, sus discípulos se acordaron de aquellas palabras de la Escritura: El celo por tu casa me consumirá.

Por eso, cuando resucitó, sus discípulos recordaron esto que había dicho, y creyeron en la Escritura y en las palabras que Jesús había pronunciado.

Se terminó el vino, y la madre de Jesús se lo hizo saber a su hijo: —No les queda vino.

Después de esto, Jesús fue con sus discípulos a la región de Judea. Se detuvo allí algún tiempo con ellos y bautizaba a la gente.

aunque de hecho no era el mismo Jesús quien bautizaba, sino sus discípulos.

Los discípulos comentaban entre sí: —¿Será que alguien le ha traído comida?

Los discípulos habían ido al pueblo a comprar comida.

Cuando quedaron satisfechos, Jesús dijo a sus discípulos: —Recoged lo que ha sobrado, para que no se pierda nada.

A la caída de la tarde, los discípulos de Jesús bajaron al lago,

Al oír esto, muchos de los que seguían a Jesús dijeron: —Esta enseñanza es inadmisible. ¿Quién puede aceptarla?

Desde entonces, muchos discípulos suyos se volvieron atrás y ya no andaban con él.

Jesús preguntó a los Doce: —¿También vosotros queréis dejarme?

Jesús replicó: —¿No os elegí yo a los Doce? Sin embargo, uno de vosotros es un diablo.

Se refería a Judas, hijo de Simón Iscariote. Porque Judas, que era uno de los Doce, lo iba a traicionar.

Otro de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro, intervino diciendo:

sus hermanos le dijeron: —Deberías salir de aquí e ir a Judea, para que tus seguidores puedan ver también allí las obras que haces.

Cuando lo encontró, lo llevó consigo a Antioquía. Y a lo largo de todo un año trabajaron los dos juntos en aquella iglesia, instruyendo en la fe a un buen número de personas. Fue precisamente en Antioquía donde por primera vez se llamó «cristianos» a los discípulos [de Jesús].

Decidieron, pues, los fieles, conforme a las posibilidades de cada uno, enviar ayuda para atender a las necesidades de los hermanos residentes en Judea.

En cualquier caso, tanto si coméis como si bebéis o hacéis cualquier otra cosa, hacedlo todo para gloria de Dios.

Durante la vida de su marido, la mujer está ligada a él; pero si el marido muere, la mujer queda libre para casarse con quien le plazca, siempre que lo hagan como cristianos.

En fin, cuanto hagáis o digáis, hacedlo todo en nombre de Jesús, el Señor, dando gracias a Dios Padre por medio de él.

Que todos respeten el matrimonio y mantengan limpia su vida conyugal, pues Dios juzgará con severidad a los adúlteros y lujuriosos.

¿No ves que estoy llamando a la puerta? Si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré en su casa y cenaré en su compañía.




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