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Referencias Cruzadas

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Jeremías 15:5

La Palabra (versión española)

¿Quién te va a compadecer, Jerusalén? ¿Quién plañirá por ti? ¿Quién dará un rodeo para interesarse por tu bienestar?

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15 Referencias Cruzadas  

¡Piedad, amigos míos, piedad, que me ha herido la mano de Dios!

El insulto ha roto mi corazón y no tiene cura alguna; esperé consuelo pero no lo tuve, no encontré quien me confortara.

Moisés salió a su encuentro, se postró ante él y lo besó; y tras interesarse mutuamente por su salud, entraron en la tienda.

Te han venido este par de desgracias, ¿quién hará duelo por ti? Ruina y quebranto, hambre y espada, ¿quién te podrá consolar?

Haré que se destrocen entre sí, los padres con los hijos —oráculo del Señor—. No pienso conmoverme; ni piedad ni compasión impedirán que los destruya.

Pues así dice el Señor: No entres en casas donde estén de luto, no participes en el duelo ni llores por ellos, pues he retirado de este pueblo mi paz —oráculo del Señor—, mi amor y mi compasión.

Después de esto —oráculo del Señor—, entregaré a Sedecías, rey de Judá, a sus cortesanos y a la gente de esta ciudad que haya sobrevivido a la peste, a la espada y al hambre, en manos de Nabucodonosor, rey de Babilonia, en manos de sus enemigos y en manos de los que quieren matarlos. Acabará con ellos a filo de espada, sin piedad, sin misericordia y sin compasión».

Aunque Sion tiende sus manos, no hay nadie que la consuele. Mandó el Señor que a Jacob lo cercasen enemigos; Jerusalén ha quedado mancillada en medio de ellos.

Todos los que te vean se apartarán de ti diciendo: «¡Nínive ha sido devastada! ¿Quién la compadecerá? ¿Dónde se podrá encontrar gente que te consuele?».

Fueron allá y entraron en la casa de Micá, donde estaba el joven levita, y le dieron el saludo de paz.

Ellos te saludarán, te ofrecerán dos panes y tú se los aceptarás.

David dejó la carga que llevaba al cuidado del encargado de intendencia, corrió hacia la formación y se interesó por la salud de sus hermanos.

y envió a diez muchachos con este encargo: —Subid a Carmel, id a ver a Nabal y saludadlo de mi parte,




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