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Referencias Cruzadas

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Génesis 6:5

La Palabra (versión española)

Y viendo el Señor que la maldad del ser humano crecía sin medida y que todos sus pensamientos tendían constantemente al mal,

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24 Referencias Cruzadas  

Los habitantes de Sodoma eran perversos y pecaban gravemente contra el Señor.

Cuando el Señor aspiró el grato aroma se dijo: «Aunque las intenciones del ser humano son perversas desde su juventud, nunca más volveré a maldecir la tierra por su culpa. Jamás volveré a destruir a todos los seres vivientes, como acabo de hacerlo.

¿qué decir del infame y corrompido, del ser humano que se sacia de maldad?

¿Caminarás por la antigua ruta que hollaron perversos mortales,

Dios desde los cielos contempla a los humanos para ver si hay algún sensato que busque a Dios.

mente que trama planes perversos, pies ligeros para correr hacia el mal,

Mira lo único que he averiguado: Dios hizo al ser humano perfecto, pero ellos se buscaron excesivas complicaciones.

Esto es lo malo de todo lo que sucede bajo el sol: que un mismo destino aguarda a todos. Además, la mente de los humanos rebosa maldad, la insensatez anida en ellos durante toda su vida, y al final, ¡con los muertos!

Nada hay más engañoso que el corazón; no tiene remedio, ¿quién lo conoce?

Limpia tu corazón de maldad, Jerusalén, si quieres salvarte. ¿Hasta cuándo ocuparán tu pecho tantos proyectos criminales?

Entonces me dijo: —¿Has visto, hijo de hombre, lo que hacen en la oscuridad los ancianos de Israel, cada cual junto a la hornacina donde están sus imágenes, al tiempo que piensan: «El Señor no nos ve, pues ha abandonado el país»?

Añadió entonces: —Entra y mira las asquerosas abominaciones que están cometiendo aquí.

Porque del corazón proceden las malas intenciones, los asesinatos, los adulterios, las inmoralidades sexuales, los robos, las calumnias y las blasfemias.

La venida del Hijo del hombre puede compararse a lo que sucedió en tiempos de Noé.

El tiempo de la venida del Hijo del hombre puede compararse a lo que sucedió en tiempos de Noé:

el Señor no lo perdonará, sino que su ira y su celo se encenderán contra esa persona, todas las maldiciones escritas en este libro caerán sobre ella, y el Señor hará que nunca más quede memoria de ella.

Porque también nosotros en otro tiempo fuimos irreflexivos y obstinados; anduvimos descarriados, esclavos de toda suerte de pasiones y placeres, y vivimos en la maldad y la envidia, odiados de todos y odiándonos unos a otros.

es decir, a los desobedientes del tiempo de Noé, cuando Dios esperaba pacientemente mientras se construía el arca, en la que unos pocos —ocho personas— se salvaron a través del agua.




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