Génesis 4:14

La Palabra (versión española)

Si hoy me condenas al destierro y a ocultarme de tu presencia, tendré que andar errante y vagabundo por el mundo, expuesto a que me mate cualquiera que me encuentre.

Referencias Cruzadas

Génesis 3:24

Y después de expulsarlo, puso al oriente del jardín de Edén a los querubines y a la espada llameante que se revolvía hacia todas partes para custodiar el acceso al árbol de la vida.

Génesis 4:13

Caín respondió al Señor: —Mi crimen es demasiado terrible para soportarlo.

2 Samuel 14:7

Y ahora toda la familia se me ha enfrentado, exigiendo que les entregue al fratricida, para darle muerte, vengar a su hermano asesinado y acabar también con el único heredero. Así apagarán el rescoldo que me queda y dejarán a mi marido sin apellido ni descendencia sobre la tierra.

Salmos 109:10

que sus hijos vaguen y mendiguen, que los echen de sus casas en ruinas.

Salmos 109:12

que no haya quien lo trate bien ni sienta piedad de sus huérfanos.

Salmos 143:7

Señor, respóndeme pronto, que mi vida se agota. ¡No me ocultes tu rostro, que no sea yo como los muertos!

Proverbios 14:32

El malvado tropieza en su maldad, el justo halla refugio en su honradez.

Proverbios 28:1

El malvado huye sin que lo persigan, el justo se siente seguro como un león.

Isaías 8:22

mirará después a la tierra: verá persecución y tiniebla, verá oscuridad angustiosa, noche cerrada sin luz.

Jeremías 52:3

Por eso, Jerusalén y Judá sufrieron las consecuencias de la cólera del Señor, que los arrojó de su presencia. Sedecías, por su parte, se rebeló contra el rey de Babilonia.

Oseas 13:3

Por eso serán como nube mañanera, como el rocío de madrugada que al instante se disipa; como paja que el viento arrebata de la era, o humo que sale por chimenea.

Levítico 26:17

Me volveré contra vosotros, y sucumbiréis delante de vuestros enemigos; os dominarán quienes os aborrecen y huiréis sin que nadie os persiga.

Levítico 26:36

Y a los que de vosotros sobrevivan, los llenaré de tal cobardía que, estando en la tierra de vuestros enemigos, el simple sonido de una hoja que se mueva los pondrá en fuga, huirán como ante la espada y caerán sin que nadie los persiga.

Números 35:19

El vengador de la sangre matará por sí mismo al asesino tan pronto como lo encuentre.

Números 35:21

o lo golpeó con su propia mano por enemistad y también le ocasionó la muerte, el agresor es un asesino y debe morir. El vengador de la sangre matará al asesino tan pronto como lo encuentre.

Números 35:27

si el vengador de la sangre, al encontrarlo fuera de los límites de su ciudad de refugio, da muerte al homicida, no comete ningún crimen.

Mateo 25:41

A los otros, en cambio, dirá: «¡Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles!

Mateo 25:46

De manera que estos irán al castigo eterno; en cambio, los justos irán a la vida eterna.

Deuteronomio 28:64

El Señor te dispersará por todas las naciones, de uno al otro extremo de la tierra. Allí rendirás culto a otros dioses, dioses de madera y de piedra, que ni tú ni tus antepasados conocisteis.

Deuteronomio 28:65

En esas naciones no hallarás paz ni descanso, porque el Señor hará que vivas atemorizado, triste y acongojado.

2 Tesalonicenses 1:9

Su castigo será la ruina eterna, la separación definitiva del Señor y de su glorioso poder,