Génesis 39:3

La Palabra (versión española)

y mientras estuvo allí, su amo se dio cuenta de que el Señor estaba con José, pues todo cuanto emprendía prosperaba.

Referencias Cruzadas

Génesis 21:20

Dios protegió al niño, y este fue creciendo. Vivía en el desierto y era un buen tirador de arco;

Génesis 21:22

En aquel tiempo Abimélec, acompañado de Picol, jefe de su ejército, dijo a Abrahán: —Dios está contigo en todo lo que haces.

Génesis 21:23

Por tanto, júrame por Dios, aquí mismo, que no me traicionarás ni a mí, ni a mis hijos, ni a mis parientes, sino que me tratarás a mí y al país que te ha acogido con la misma lealtad que yo te he mostrado.

Génesis 26:24

Y aquella misma noche el Señor se le apareció y le dijo: Yo soy el Dios de tu padre Abrahán. No temas, porque yo estoy contigo. Te bendeciré y multiplicaré tu descendencia, por amor a mi siervo Abrahán.

Génesis 26:28

Ellos respondieron: —Nos hemos dado cuenta de que el Señor está contigo y queremos proponerte sellar entre nosotros una alianza con juramento.

Génesis 30:27

Pero Labán le contestó: —Si yo significo algo para ti, por favor, escúchame. He sabido por un oráculo que el Señor me ha estado bendiciendo gracias a ti.

Génesis 30:30

lo poco que tenías antes de que yo viniera ha aumentado prodigiosamente, pues desde que llegué, el Señor te ha bendecido. Pero ya es hora de que también haga algo por mi propia familia.

Génesis 39:2

El Señor estaba con José, así que todo lo que emprendía prosperaba. José fue llevado a casa de su amo egipcio,

Génesis 39:21

Pero el Señor seguía estando con él y no dejó de mostrarle su favor. Hizo que se ganara la simpatía del jefe de la cárcel,

Génesis 39:23

El jefe de la cárcel no tenía que preocuparse por nada de lo que estaba a cargo de José, pues el Señor estaba con él, y cuanto José emprendía, el Señor lo hacía prosperar.

2 Reyes 18:7

El Señor lo acompañó y tuvo éxito en todas sus empresas. Se rebeló contra el rey de Asiria y dejó de rendirle vasallaje.

1 Crónicas 22:13

Tendrás éxito si procuras practicar los mandatos y normas que el Señor prescribió a Israel por medio de Moisés. ¡Ten ánimo y valor! ¡No temas ni te acobardes!

1 Crónicas 9:20

Antiguamente su jefe había sido Finés, el hijo de Eleazar; y el Señor estaba con él.

2 Crónicas 1:1

Salomón, hijo de David, se afianzó en su reino. El Señor su Dios estaba con él y lo engrandeció extraordinariamente.

2 Crónicas 26:5

Recurrió a Dios mientras vivió Zacarías, que lo educó en el respeto a Dios; y mientras recurrió al Señor, Dios le dio prosperidad.

Nehemías 2:20

Les repliqué: —El Dios de los cielos nos dará éxito. Nosotros, sus siervos, pondremos manos a la obra y llevaremos a cabo la reconstrucción. Vosotros, en cambio, no tenéis parte, ni derecho, ni nada que recordar en Jerusalén.

Salmos 1:3

Es como un árbol plantado junto al arroyo: da fruto a su tiempo y no se secan sus hojas; consigue todo cuanto emprende.

Zacarías 8:23

Así dice el Señor del universo: —Sucederá en aquellos días que diez hombres procedentes de distintas naciones y lenguas asirán a un judío por la orla del manto y le dirán: «Queremos unirnos a vosotros porque hemos oído que Dios está con vosotros».

Mateo 5:16

Pues así debe alumbrar vuestra luz delante de los demás, para que viendo el bien que hacéis alaben a vuestro Padre celestial.

1 Corintios 16:2

Cada primer día de la semana aportad cada uno de vosotros lo que hayáis podido ahorrar, para que no haya que andar con colectas cuando os visite.

Deuteronomio 2:7

Porque el Señor tu Dios te ha bendecido en todo lo que has emprendido, ha protegido tu caminar a través de este inmenso desierto y nada te ha faltado durante estos cuarenta años, porque el Señor tu Dios ha estado contigo».

Josué 1:9

Te he mandado que seas fuerte y valiente. No tengas, pues, miedo ni te acobardes, porque el Señor tu Dios estará contigo dondequiera que vayas.

Apocalipsis 3:9

Por ello, voy a poner en tus manos a los de la sinagoga de Satanás, a esos que se precian de judíos, pero mienten, porque no lo son. Voy a hacer que se postren a tus pies, para que sepan que he puesto en ti mi amor.

1 Samuel 18:14

y tenía éxito en todas sus campañas, porque el Señor estaba con él.

1 Samuel 18:28

Saúl comprendió que el Señor estaba con David y que su hija Mical lo amaba.

1 Samuel 3:19

Samuel seguía creciendo y el Señor lo protegía, sin dejar de cumplir ni una sola de sus palabras.