Multiplicaré tu descendencia como el polvo de la tierra; solo la podrá contar quien sea capaz de contar todos los granos de polvo que hay en la tierra.
En aquel día hizo el Señor una alianza con Abrán en estos términos: —A tus descendientes les daré esta tierra, desde el río de Egipto hasta el gran río, el Éufrates:
te colmaré de bendiciones y multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena de la playa. Tus descendientes conquistarán las ciudades de sus enemigos
Pero el Señor se compadeció de ellos y los atendió en consideración a su alianza con Abrahán, Isaac y Jacob. Por eso no quiso exterminarlos ni expulsarlos de su presencia hasta el presente.
Son descendientes de Israel; Dios los ha adoptado como hijos y se ha hecho gloriosamente presente en medio de ellos. Les pertenecen la alianza, la ley, el culto y las promesas;