Génesis 1:3

La Palabra (versión española)

Entonces dijo Dios: —¡Que exista la luz! Y la luz existió.

Referencias Cruzadas

Génesis 2:4

Esta es la historia de la creación del cielo y de la tierra. Cuando Dios, el Señor, hizo la tierra y el cielo

Job 36:30

El Altísimo despliega su relámpago, que ilumina la profundidad del mar.

Job 38:19

¿Dónde está la casa de la luz y dónde viven las tinieblas?

Salmos 104:2

Como un manto te envuelve la luz, como un tapiz extiendes el cielo.

Salmos 118:27

Dios es el Señor, él nos alumbra, ¡atad con ramas la víctima festiva a los salientes del altar!

Salmos 148:5

Que alaben el nombre del Señor, pues lo mandó y fueron creados,

Salmos 33:6

Con la palabra del Señor se hicieron los cielos, con el soplo de su boca el cortejo celeste.

Salmos 33:9

porque habló y todo fue hecho, él dio la orden y todo existió.

Salmos 97:11

La luz se propaga para el justo, la alegría para quienes son rectos.

Isaías 45:7

el que hace la luz y crea la tiniebla, el que opera la paz y crea la desgracia. Yo, el Señor, hago todo esto.

Isaías 60:19

Ya no será el sol tu luz durante el día, ni el resplandor de la luna te alumbrará, pues será el Señor tu luz para siempre, tu Dios te servirá de resplandor;

Mateo 8:3

Jesús extendió la mano y lo tocó, diciendo: —Quiero. Queda limpio. Y al instante el leproso quedó limpio.

Juan 1:5

luz que resplandece en las tinieblas y que las tinieblas no han podido sofocar.

Juan 1:9

La verdadera luz, la que ilumina a toda la humanidad, estaba llegando al mundo.

Juan 11:43

Dicho esto, exclamó con voz potente: —¡Lázaro, sal afuera!

Juan 3:19

La causa de esta condenación está en que, habiendo venido la luz al mundo, los seres humanos prefirieron las tinieblas a la luz, pues su conducta era mala.

2 Corintios 4:6

Pues el mismo Dios que dijo: Resplandezca la luz desde el seno de las tinieblas, para que irradiemos la luz del conocimiento glorioso de Dios reflejado en el rostro de Cristo.

Efesios 5:14

y lo que queda al descubierto, se convierte, a su vez, en luz. Por eso se dice: «Despierta tú que estás dormido, levántate de la muerte, y te iluminará Cristo».

Efesios 5:8

En otro tiempo erais tinieblas, pero ahora sois luz al estar unidos al Señor. Portaos como hijos de la luz,

1 Timoteo 6:16

el único que es inmortal, que habita una luz inaccesible y a quien nadie ha visto ni puede ver. Suyos son por siempre el honor y el poder. Amén.

1 Juan 1:5

Este es el mensaje que escuchamos a Jesucristo y que ahora os anunciamos: Dios es luz sin mezcla de tinieblas.

1 Juan 2:8

Y, sin embargo, se trata de un mandamiento nuevo, en cuanto que se realiza en Cristo y en vosotros; porque las tinieblas van pasando y ya alumbra la luz verdadera.