Éxodo 3:1

La Palabra (versión española)

Moisés pastoreaba el rebaño de Jetró, su suegro, sacerdote de Madián. Conduciendo el rebaño a través del desierto, llegó al Horeb, el monte de Dios.

Referencias Cruzadas

1 Reyes 19:19

Elías se marchó de allí y encontró a Eliseo, hijo de Safat, que estaba arando con doce yuntas de bueyes e iba detrás de la última. Elías pasó junto a él y lo cubrió con su manto.

1 Reyes 19:8

Elías se levantó, comió y bebió; y con la fuerza de aquella comida caminó durante cuarenta días y cuarenta noches hasta el Horeb, el monte de Dios.

Salmos 106:19

En Horeb hicieron un becerro, adoraron una imagen de metal,

Éxodo 17:6

Yo estaré contigo allí, junto a la peña de Horeb; golpearás la peña y de ella manará agua para que el pueblo beba. Así lo hizo Moisés a la vista de los ancianos de Israel.

Éxodo 18:12

Después Jetró, suegro de Moisés, ofreció un holocausto y sacrificios al Señor; Aarón y todos los ancianos de Israel, por su parte, compartieron un banquete con el suegro de Moisés, en presencia del Señor.

Éxodo 19:11

y estén preparados para pasado mañana porque, de aquí a tres días, el Señor descenderá sobre el monte Sinaí a la vista de todo el pueblo.

Éxodo 19:2

Habían partido de Refidín, y al llegar al desierto del Sinaí, acamparon allí, frente al monte.

Éxodo 19:3

Moisés subió a encontrarse con Dios y el Señor lo llamó desde el monte diciéndole: —Anuncia esto a los descendientes de Jacob; dáselo a conocer a los israelitas:

Éxodo 2:16

El sacerdote de Madián tenía siete hijas. Vinieron estas a sacar agua y, mientras estaban llenando el abrevadero para dar de beber al rebaño de su padre,

Éxodo 2:18

Cuando regresaron a casa de su padre Reuel, este les preguntó: —¿Cómo es que hoy habéis regresado tan pronto?

Éxodo 2:21

Moisés se quedó a vivir en casa de Reuel, el cual le dio a su hija Séfora por esposa.

Éxodo 24:13

Moisés, junto con su ayudante Josué, subió al monte de Dios,

Éxodo 3:12

Dios le contestó: —Yo estaré contigo, y esta es la señal de que soy yo quien te envía: cuando hayas sacado de Egipto al pueblo, me adoraréis en este monte.

Éxodo 3:5

Dios le dijo: —No te acerques; quítate las sandalias, porque estás pisando un lugar sagrado.

Éxodo 33:6

Y por eso, a partir del monte Horeb, los israelitas dejaron de usar sus joyas.

Éxodo 4:18

Moisés volvió a casa de su suegro Jetró, y le dijo: —Déjame ir a Egipto. Tengo que regresar adonde están mis hermanos, para ver si siguen vivos. Respondió Jetró: —Vete en paz.

Éxodo 4:27

Dijo el Señor a Aarón: —Vete al desierto a recibir a Moisés. Aarón fue y, cuando lo encontró en el monte de Dios, lo abrazó.

Amós 1:1

Palabras que Amós, uno de los pastores de Tecoa, recibió sobre Israel en visión profética en tiempos de Ozías, rey de Judá, y de Jeroboán, hijo de Joás, rey de Israel, dos años antes del terremoto.

Números 10:29

Moisés dijo a su suegro Jobab del clan madianita de Ragüel: —Nosotros partimos hacia la tierra que el Señor ha prometido darnos. Ven con nosotros y seremos generosos contigo, pues el Señor ha prometido ser generoso con Israel.

Números 10:33

Marcharon, pues, del monte del Señor e hicieron tres jornadas de camino. El Arca de la alianza del Señor los acompañó durante los tres días de camino, buscándoles un lugar donde acampar;

Lucas 2:8

En unos campos cercanos había unos pastores que pasaban la noche a la intemperie cuidando sus rebaños.

Hechos 7:30

Pasaron cuarenta años y, estando Moisés en el desierto del monte Sinaí, se le apareció un ángel en medio de las llamas de una zarza que estaba ardiendo.

Deuteronomio 1:2

Desde el monte Horeb hasta Cadés Barnea hay once jornadas de camino, por la ruta de la montaña de Seír.

Deuteronomio 1:6

El Señor, nuestro Dios, nos dijo esto en el Horeb: —¡Ya lleváis mucho tiempo en estas montañas!

Deuteronomio 4:10

El día en que estuviste delante del Señor tu Dios, en el Horeb, cuando el Señor me dijo: «Reúneme al pueblo y les haré escuchar mis palabras, para que aprendan a respetarme mientras vivan en la tierra y se las enseñen a sus hijos»,

Jueces 4:11

Jéber, el quenita, se había separado de la tribu de Caín y del clan de los hijos de Jobab, el suegro de Moisés, y había plantado su tienda cerca de la Encina de Sananín, en Cadés.

1 Samuel 16:11

Luego preguntó a Jesé: —¿No te quedan más hijos? Y Jesé le respondió: —Falta el más pequeño, que está guardando el rebaño. Y Samuel le dijo: —Manda a buscarlo, pues no comenzaremos hasta que venga.