Él hundió en el mar los carros y el ejército del faraón; lo mejor de sus capitanes el mar de las Cañas se tragó.
Tú eres temible, ¿quién resistirá ante ti cuando tu cólera estalle?
mientras ella les cantaba: «Cantad al Señor, porque sublime ha sido su victoria; caballos y jinetes hundió en el mar».
machacaré caballos y jinetes, machacaré carros y aurigas;