Cantares 2:14

La Palabra (versión española)

Paloma mía, escondida en las grietas de las rocas, en los huecos más recónditos, déjame ver tu figura, déjame escuchar tu voz, ¡es tan dulce tu voz y tan bella tu figura!».

Referencias Cruzadas

Job 9:16

aunque respondiera a mi requerimiento, no creo que atendiera a mis palabras.

Salmos 110:3

Tu pueblo se te ofrecerá cuando se manifieste tu poder; con sagrado esplendor, desde el seno de la aurora, como rocío te he engendrado.

Salmos 22:3

Tú eres el Santo, el que se sienta en el trono, rodeado por las alabanzas de Israel.

Salmos 45:11

El rey está prendado de tu belleza, él es tu señor, ¡póstrate ante él!

Salmos 45:12

Hija de Tiro, con obsequios te agasajan los poderosos del pueblo.

Salmos 50:23

Quien ofrece un sacrificio de alabanza me da gloria: al de conducta íntegra le haré ver la salvación de Dios.

Salmos 68:13

mientras vosotros reposáis entre fogones, se cubren de plata las alas de la paloma y de un pálido oro su plumaje.

Salmos 74:19

¡No arrojes a las fieras la vida de tu tórtola, no olvides jamás la vida de tus humildes!

Éxodo 3:6

Y añadió: —Yo soy el Dios de tus antepasados, el Dios de Abrahán, de Isaac y de Jacob. Moisés, sintió miedo de mirar a Dios y se tapó la cara.

Proverbios 15:8

El Señor aborrece el sacrificio del malvado, la oración del honrado le agrada.

Cantares 1:15

¡Qué hermosa eres, amor mío! ¡Qué hermosa eres! ¡Tus ojos son palomas!

Cantares 1:5

Soy morena, pero hermosa, muchachas de Jerusalén, como tiendas de Quedar, como lonas de Salmá.

Cantares 1:8

Si no lo sabes tú, hermosa entre las mujeres, sigue las huellas del rebaño y lleva a pastar tus cabritillas por las cabañas de los pastores.

Cantares 5:2

Yo dormía con el corazón en vela y escuché la voz de mi amor: —Ábreme, hermana y compañera mía, mi paloma sin defecto, que traigo la cabeza cubierta de rocío y los rizos mojados del relente nocturno.

Cantares 8:13

Señora de los jardines, mis compañeros te escuchan, ¡déjame escuchar tu voz!

Isaías 2:21

se meterá en las grutas de las rocas, en las grietas de las peñas, cuando llegue el Señor terrible, henchido de majestad, dispuesto a causar terror a la tierra.

Isaías 51:3

El Señor consuela a Sion, consuela a todas sus ruinas; transformará su desierto en Edén, su desolación en jardín del Señor; en ella habrá gozo y alegría, acciones de gracias y cantos.

Isaías 6:5

Me dije entonces: «¡Ay de mí, estoy perdido! Soy un hombre de labios impuros, yo, que habito entre gente de labios impuros, y he visto con mis propios ojos al Rey, Señor del universo».

Isaías 60:8

¿Quiénes son esos que vuelan como nubes, que se dirigen como palomas a su palomar?

Jeremías 48:28

Dejad las ciudades, habitad en los riscos habitantes de Moab; anidad como palomas a la entrada de las grietas.

Jeremías 49:16

Fracasaron tus acciones que infundían terror, la arrogancia que llenaba tu corazón: habitas en los huecos de la roca, pertrechado en lo más alto de las cumbres; pero aunque anides arriba como el águila, haré que desciendas de allí —oráculo del Señor.

Ezequiel 7:16

Algunos escaparán huyendo por las montañas, gimiendo como palomas; pero todos morirán, cada cual por su pecado.

Daniel 9:7

Tú, Señor, eres justo, mientras que nosotros, la gente de Judá, los habitantes de Jerusalén y todo Israel, los de cerca y los de lejos, en todos los países por donde nos dispersaste a causa de nuestra infidelidad hacia ti, nos encontramos ahora cubiertos de vergüenza.

Abdías 1:3

La soberbia de tu corazón te ha engañado; tú, que habitas en lugares rocosos, asentada sobre las alturas, dices en tu corazón: «¿Quién me derribará por tierra?».

Mateo 10:16

Mirad, os envío como ovejas en medio de lobos. Por eso, sed astutos como serpientes, aunque también inocentes como palomas.

Mateo 3:16

Una vez bautizado, Jesús salió enseguida del agua. En ese momento se abrieron los cielos y Jesús vio que el Espíritu de Dios descendía como una paloma y se posaba sobre él.

Efesios 5:27

Se preparó así una Iglesia radiante, sin mancha, ni arruga, ni nada semejante; una Iglesia santa e inmaculada.

Colosenses 1:22

Ahora, en cambio, por la muerte que Cristo ha sufrido en su cuerpo mortal, Dios ha hecho la paz con vosotros para admitiros en su presencia como a pueblo consagrado, sin mancha y sin tacha.

Hebreos 10:22

Acerquémonos, pues, con un corazón sincero y lleno de fe, con una conciencia purificada de toda maldad, con el cuerpo bañado en agua pura.

Hebreos 4:16

Acerquémonos, pues, llenos de confianza a ese trono de gracia, seguros de encontrar la misericordia y el favor divino en el momento preciso.

1 Pedro 3:4

cuanto el interior, el del corazón: el adorno incorruptible de un espíritu apacible y sereno, que es la auténtica belleza a los ojos de Dios.

Judas 1:24

Al que puede manteneros limpios de pecado y conduciros alegres y sin mancha hasta su gloriosa presencia,

Apocalipsis 5:8

Apenas recibió el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron ante el Cordero; todos tenían cítaras y copas de oro llenas de perfume, que son las oraciones de los santos.