Apocalipsis 6:4

La Palabra (versión española)

Salió entonces otro caballo de color rojo. A su jinete se le dio una gran espada con la misión de borrar la paz de la tierra provocando guerras fratricidas.

Referencias Cruzadas

Salmos 17:13

¡Ponte, Señor, en acción; hazle frente, derrótalo! ¡Que tu espada me libre del malvado

Daniel 5:19

A causa de aquel poder que el Dios Altísimo le había concedido, la gente de todos los pueblos, naciones y lenguas temblaban de miedo ante él. Ejecutaba o dejaba con vida a quien quería; a unos engrandecía y a otros humillaba.

Zacarías 1:8

—He tenido durante la noche una visión: vi a un hombre que estaba sentado en un caballo rojo entre los mirtos de la hondonada; detrás de él había caballos rojos, alazanes y blancos.

Zacarías 6:2

El primer carro iba tirado por caballos alazanes, el segundo por caballos negros,

Mateo 10:34

No creáis que he venido a traer la paz al mundo. ¡No he venido a traer paz, sino guerra!

Mateo 24:6

Llegarán a vuestros oídos noticias de guerras y rumores de conflictos bélicos. No os alarméis, pues, aunque todo esto tenga que suceder, todavía no será el fin.

Juan 19:11

Jesús le respondió: —No tendrías autoridad alguna sobre mí si Dios no te la hubiera concedido; por eso, el que me ha entregado a ti es mucho más culpable que tú.

Apocalipsis 12:3

Entonces otra figura prodigiosa apareció en el cielo: un enorme dragón color de fuego, con siete cabezas y diez cuernos, y una diadema en cada una de sus siete cabezas.

Apocalipsis 13:10

El que esté destinado a ser cautivo, en cautivo se convertirá. El que haya de morir a espada, a filo de espada morirá. ¡Ha sonado la hora de poner a prueba la firmeza y la fe de los consagrados a Dios!

Apocalipsis 17:3

Me llevó, pues, en visión a un desierto, donde vi a una mujer montada en una bestia de color rojo escarlata. La bestia tenía siete cabezas y diez cuernos y estaba cubierta de títulos blasfemos.

Apocalipsis 17:6

Y vi cómo la mujer se emborrachaba con la sangre de los consagrados a Dios y de los que fueron mártires por amor a Jesús.