Joab se incorporó, partió hacia Guesur y trajo a Absalón a Jerusalén.
Joab se inclinó en tierra, hizo una reverencia, bendijo al rey y dijo: —Ahora sé que cuento con tu favor, majestad, pues me has concedido este deseo.
el segundo, Quilab, de Abigail, la mujer de Nabal, el de Carmel; el tercero, Absalón, hijo de Maacá, la hija de Tolmay, rey de Guesur;
Y sucedió que Jaír, hijo de Manasés, se adueñó de toda la región de Argob hasta el límite con Guesur y Maacá, y puso su propio nombre a esa parte de Basán llamándola: Aldeas de Jaír, que es el nombre que aún conservan).