2 Samuel 13:3

La Palabra (versión española)

Amnón tenía un amigo muy astuto, llamado Jonadab, hijo de Simá, el hermano de David.

Referencias Cruzadas

Génesis 3:1

La serpiente, el más astuto de todos los animales del campo que Dios, el Señor, había hecho, entabló conversación con la mujer diciendo: —¿Conque Dios os ha dicho que no comáis de ningún árbol del jardín?

Génesis 38:1

Por aquel tiempo, Judá se apartó de sus hermanos y se fue a vivir a la casa de un tal Jira, adulamita.

Génesis 38:20

Más tarde, Judá mandó el cabrito por medio de su amigo adulamita, para recuperar los objetos que había dejado a la mujer, pero Jirá no dio con ella.

2 Samuel 13:2

Sentía tal pasión que cayó enfermo por Tamar, pues su hermana era virgen y le parecía muy difícil hacer algo con ella.

2 Samuel 13:32

Pero Jonadab, hijo de Simá, el hermano de David, dijo: —No crea mi señor que han matado a todos los jóvenes hijos del rey, pues solo ha muerto Amnón. Absalón lo tenía decidido desde el día en que Amnón violó a su hermana Tamar.

2 Samuel 13:4

Y le preguntó: —¿Qué te pasa, príncipe, que cada día estás más decaído? ¿No me lo vas a contar? Amnón le respondió: —Estoy enamorado de Tamar, la hermana de mi hermano Absalón.

2 Samuel 14:2

Entonces mandó que le trajeran de Tecoa una mujer astuta que vivía allí. Joab le dijo: —Finge que estás de luto, ponte ropa de luto y no te eches perfume, para que parezcas una mujer que desde hace tiempo guarda luto por un difunto.

2 Samuel 21:21

desafió a Israel; pero Jonatán, hijo de Samá, el hermano de David, lo mató.

1 Crónicas 2:13

Jesé fue el padre de Eliab, su primogénito; de Abinadab, el segundo; de Simá, el tercero;

1 Crónicas 27:32

Jonatán, el tío de David, hombre inteligente, era consejero y secretario. Jiel, hijo de Jacmoní, era preceptor de los hijos del rey.

Ester 5:10

se contuvo, sin embargo, y se fue a casa. Luego mandó llamar a sus amigos y a Zeres, su mujer,

Ester 5:14

Entonces su esposa Zeres y sus amigos le dijeron: —¿Por qué no mandas construir una horca de veinticinco metros de altura, y por la mañana le pides al rey que cuelgue en ella a Mardoqueo? Así irás feliz al banquete con el rey. La sugerencia agradó a Amán, que mandó construir la horca.

Ester 6:13

Amán contó a Zeres, su mujer, y a todos sus amigos lo que había sucedido. Zeres y sus consejeros le dijeron: —Si ese Mardoqueo, ante el cual estás empezando a caer, es de raza judía, no podrás vencerlo. Sin duda que acabarás fracasando.

Proverbios 19:6

Muchos buscan el favor del poderoso y todos se hacen amigos del espléndido.

Jeremías 4:22

Mi pueblo es un necio, ni siquiera me conoce; son gente insensata, que no recapacita; expertos en el mal, inexpertos para el bien.

1 Corintios 3:19

Porque la sabiduría del mundo es necedad a los ojos de Dios. Así lo dice la Escritura: Dios atrapa a los sabios en la trampa de su propia astucia.

Santiago 3:15

Semejante sabiduría no viene de lo alto, sino que es terrena, carnal, diabólica.

Jueces 14:20

En cuanto a la mujer de Sansón, la dieron por esposa a uno de sus amigos más cercanos.

1 Samuel 16:11

Luego preguntó a Jesé: —¿No te quedan más hijos? Y Jesé le respondió: —Falta el más pequeño, que está guardando el rebaño. Y Samuel le dijo: —Manda a buscarlo, pues no comenzaremos hasta que venga.

1 Samuel 16:9

Jesé le presentó a Samá, y Samuel volvió a decir: —Tampoco a este lo ha elegido el Señor.