Así tendréis la prueba que andáis buscando de que Cristo habla por medio de mí. Cristo, que no ha dado muestras de debilidad entre vosotros, sino que las ha dado de poder.
ni las armas con que peleo son humanas, sino divinas, con poder para destruir cualquier fortaleza. Soy capaz de poner en evidencia toda suerte de falacia
A quien vosotros perdonasteis, también yo le perdono; en realidad, lo que yo he perdonado —si algo he tenido que perdonar— lo he hecho por vosotros, y el mismo Cristo es testigo.
Dios, por su parte, tiene poder para colmaros de bendiciones de modo que, siempre y en cualquier circunstancia, tengáis lo necesario y hasta os sobre para que podáis hacer toda clase de buenas obras.