Proclamadlo en los palacios de Asur, pregonadlo en los de Egipto, y decid: «Reuníos en los montes de Samaría, mirad cómo rebosa de desórdenes, cómo abunda la violencia dentro de ella».
Felipe, a su vez, se encontró en Azoto, circunstancia que aprovechó para anunciar el evangelio en las ciudades por las que fue pasando hasta llegar a Cesarea.
Desde el río Sijor, en la frontera de Egipto, hasta el término de Ecrón por el norte, es considerado como de los cananeos. Quedan los cinco principados filisteos: el de Gaza, el de Asdod, el de Ascalón, el de Gat y el de Ecrón. Quedan los avitas,
La palabra de Samuel se recibía en todo Israel. Por aquellos días Israel salió a luchar contra los filisteos y acampó en Eben Ézer, mientras que los filisteos acamparon en Afec.