1 Samuel 15:11

La Palabra (versión española)

—Me arrepiento de haber elegido rey a Saúl, pues me ha vuelto la espalda y no ha cumplido mis órdenes. Samuel se entristeció y estuvo suplicando al Señor toda la noche.

Referencias Cruzadas

Génesis 6:6

le pesó haber creado al ser humano sobre la tierra. Entonces, con dolor de corazón,

Génesis 6:7

dijo: —Voy a borrar de la superficie de la tierra al ser humano que he creado, y también a los animales, reptiles y aves del cielo. ¡Cómo me arrepiento de haberlos creado!

2 Samuel 24:16

Cuando el ángel extendía su mano para castigar a Jerusalén, el Señor se arrepintió del castigo y dijo al ángel que aniquilaba a la población: —¡Basta ya! ¡Retira tu mano! El ángel del Señor estaba junto a la era de Arauná, el jebuseo.

1 Reyes 11:9

El Señor se encolerizó contra Salomón por haber apartado su corazón del Señor, Dios de Israel, que se le había aparecido dos veces,

1 Crónicas 10:13

Saúl murió a causa de la infidelidad que cometió contra el Señor, por no atender a su palabra y por haber consultado a una hechicera,

1 Crónicas 21:15

Dios envió un ángel a Jerusalén para destruirla. Pero cuando vio cómo la destruía, el Señor se arrepintió del castigo y dijo al ángel exterminador: —¡Basta ya! ¡Retira tu mano! El ángel del Señor estaba junto a la era de Ornán, el jebuseo.

Job 34:27

por haberle sido desleales, por haber ignorado sus designios,

Salmos 109:4

En pago de mi amistad, me acusan y yo no hago sino interceder por ellos.

Salmos 110:4

El Señor lo ha jurado y no va a arrepentirse: «Tú serás sacerdote para siempre, como lo fue Melquisedec».

Salmos 119:136

Vierten mis ojos ríos de agua, porque no se respeta tu ley.

Salmos 125:5

Mas a quienes siguen senderos tortuosos, que el Señor los lleve con los malhechores. ¡Que reine la paz en Israel!

Salmos 36:3

Son sus palabras maldad y mentira, no quiere ser sensato ni obrar bien.

Salmos 78:41

Una y otra vez provocaban a Dios, enojaban al Santo de Israel.

Salmos 78:57

Lo abandonaron, lo traicionaron como sus padres, se desviaron como un arco mal tensado.

Éxodo 32:11

Entonces Moisés intentó aplacar el furor del Señor, su Dios, diciendo: —Señor, ¿por qué vas a descargar tu ira contra tu pueblo, el mismo en favor del que hiciste uso de tu gran fuerza y poder para sacarlo de Egipto?

Éxodo 32:14

Entonces el Señor renunció a aplicar el castigo con que había amenazado a su pueblo.

Jeremías 11:10

Han vuelto a los pecados de sus antepasados, que se negaron a escuchar mis palabras: van detrás de dioses extranjeros y les dan culto; tanto Israel como Judá han roto la alianza que hice con sus antepasados.

Jeremías 13:17

Pero si no escucháis, lloraré en secreto vuestra arrogancia; mis ojos llorarán cuando se lleven deportado al rebaño del Señor.

Jeremías 34:16

Pero os habéis arrepentido de lo hecho y habéis profanado mi nombre, haciendo volver cada cual a su esclavo o esclava, después de haberlos dejado en libertad, y los habéis reducido así a su condición previa.

Jeremías 9:1

¡Ojalá encontrara refugio en el desierto para abandonar y alejarme de mi pueblo, pues todos son adúlteros, banda de traidores!

Jeremías 9:18

Voces de duelo llegan desde Sion: «¡Qué desolados estamos, qué terrible decepción! Hemos abandonado el país, nos echaron de nuestras moradas».

Ezequiel 18:24

En cambio, a la persona honrada que abandone su honradez y empiece a actuar con malicia, cometiendo las mismas infamias que cometía el malvado del que hemos hablado, no le será recordada la honradez con la que había actuado; morirá conforme a las malas acciones y a los pecados que haya cometido.

Amós 7:3

Se arrepintió de ello el Señor y dijo: «Eso no sucederá» —aseguró el Señor.

Jonás 3:10

Al ver Dios la actuación de los ninivitas y cómo se habían arrepentido de su mala conducta, se retractó del castigo que les había anunciado y no lo llevó a cabo.

Jonás 4:2

y oró al Señor con estas palabras: —¡Oh, Señor! ¿Acaso no era esto lo que yo me decía mientras estaba en mi tierra? Por esto me apresuré a huir hacia Tarsis, porque yo sabía que tú eres un Dios benévolo y compasivo, lento para enojarte y lleno de amor; yo sabía que te retractas del castigo.

Sofonías 1:6

a los que se alejan del Señor y no lo buscan ni consultan.

Mateo 24:13

Pero el que se mantenga firme hasta el fin, ese se salvará.

Mateo 5:44

Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen.

Lucas 6:12

Por aquellos días, Jesús se fue al monte a orar, y se pasó toda la noche orando a Dios.

Hebreos 10:38

Y el justo por la fe vivirá ; mas si se acobarda, dejará de agradarme.

Josué 22:16

—Esto dice toda la comunidad del Señor: «¿Qué prevaricación es esa que habéis cometido hoy contra el Dios de Israel, apartándoos del Señor y rebelándoos contra él al construiros un altar?

1 Samuel 12:23

Por mi parte, Dios me libre de pecar contra el Señor, dejando de interceder por vosotros. Yo os enseñaré el camino bueno y recto.

1 Samuel 13:13

Samuel dijo a Saúl: —¡Has perdido el juicio! Si hubieras guardado el precepto que el Señor tu Dios te impuso, el Señor habría consolidado para siempre tu reinado sobre Israel.

1 Samuel 15:10

El Señor dirigió a Samuel este mensaje:

1 Samuel 15:3

Por tanto, ataca a Amalec, consagra sin miramientos al exterminio todas sus pertenencias y mata hombres y mujeres, muchachos y bebés, vacas y ovejas, camellos y asnos.

1 Samuel 15:35

Samuel ya no volvió a ver en su vida a Saúl, pero sentía pena por él, porque el Señor se había arrepentido de haberlo nombrado rey de Israel.

1 Samuel 15:9

Pero Saúl y el ejército perdonaron la vida a Agag y a las mejores ovejas y vacas, a las terneras y a los corderos, es decir, a todo lo valioso, y no quisieron consagrarlo al exterminio. En cambio sí aniquilaron todas las cosas inútiles y sin valor.

1 Samuel 16:1

El Señor dijo a Samuel: —¿Hasta cuándo vas a seguir llorando por Saúl, si yo mismo lo he rechazado como rey de Israel? Llena tu cuerno de aceite y prepárate que voy a enviarte a Jesé, el de Belén, pues me he elegido un rey entre sus hijos.

1 Samuel 8:6

Le disgustó a Samuel el hecho de que le pidieran un rey para que los gobernara y se puso a orar al Señor.