Siento gran tristeza al recordar cómo avanzaba yo entre el gentío, llevándolos a la casa de Dios entre vítores de gozo y alabanza en medio de una muchedumbre en fiesta.
Álzate y grita en la noche, al comienzo de las guardias; desahoga el corazón en presencia de mi Dios y levanta hacia él tus manos por la vida de tus niños.
Se reunieron en Mispá, sacaron agua, la derramaron ante el Señor y ayunaron aquel día, diciendo: —Hemos pecado contra el Señor. Samuel juzgó a los israelitas en Mispá.