Ha enviado también sus criadas con invitaciones; clama sobre las cimas de las eminencias de la ciudad:
¡El Señor da la buena nueva; numerosa es la compañía de mujeres que la publican!
Pues se sienta a la entrada de su casa, o sobre un asiento en los lugares altos de la ciudad,
¡Quienquiera que sea simple, vuélvase hacia acá! y a los faltos de inteligencia les dice:
Por tanto id a las salidas de los caminos, y a cuantos hallareis, convidadlos a las bodas.
Por esto también la sabiduría de Dios ha dicho: Les enviaré profetas y mensajeros; y a muchos de ellos matarán y perseguirán;
Y al tiempo de la cena envió a su siervo a decir a los convidados: Venid, que ya todo está aparejado.
Jesús le respondió: Yo he hablado abiertamente al mundo; enseñaba siempre en las sinagogas y en el Templo, donde concurren todos los judíos; y nada he hablado en secreto.
¶Y en el último día, el gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie, y clamó, diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba.
y ¿cómo predicarán, si no fueren enviados? así como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que traen buenas nuevas de bendiciones!