Los ricos y los pobres se encuentran; Jehová es el hacedor de todos ellos.
El que en el seno maternal me hizo a mí, ¿no le hizo a él también? ¿y no nos formó uno mismo en la matriz?
¿Cuánto menos a Aquel que no acepta la persona de los príncipes, ni hace caso del rico, más que del pobre? porque obra de sus manos son todos ellos.
El que oprime al pobre vitupera a su Hacedor; mas le honra aquel que se compadece del menesteroso.
El pobre y el opresor se encuentran; Jehová hace que su sol alumbre los ojos de entrambos.
Y no puede el ojo decir a la mano: No tengo necesidad de ti; ni tampoco puede decir la cabeza a los pies: No tengo necesidad de vosotros.
Jehová empobrece, y él da riquezas; él abate, y también ensalza.