Proverbios 2:1

Biblia Version Moderna (1929)

HIJO mío, ¡oh si tú recibieras mis palabras, y atesoraras mis mandamientos dentro de ti;

Referencias Cruzadas

Job 23:12

Del mandamiento de sus labios no me apartaré: más que mi porción diaria he apreciado los dichos de su boca.

Salmos 90:12

Así enséñanos a contar nuestros días, y alcanzaremos un corazón dotado de sabiduría.

Proverbios 1:3

para que se adquiera instrucción en el buen proceder, en la justicia, en el juicio y en la equidad:

Proverbios 28:7

El que guarda la ley es hijo entendido; mas aquel que es compañero de los libertinos, afrenta a su padre.

Proverbios 3:1

HIJO mío, no te olvides de mi ley, mas guarde tu corazón mis mandamientos;

Proverbios 4:1

¡OÍD, hijos, la instrucción de un padre, y prestad atención para conocer la inteligencia!

Proverbios 4:10

¡Oye, hijo mío, y recibe mis dichos, para que sean muchos los años de tu vida!

Proverbios 6:21

¡Átalos de continuo sobre tu corazón, cíñelos, cual collar, a tu garganta!

Proverbios 7:1

¡HIJO mío, guarda mis dichos, y atesora mis mandamientos dentro de ti!

Proverbios 8:1

¿NO clama la sabiduría, y da su voz la inteligencia?

Proverbios 9:1

LA sabiduría ha edificado su casa, ha labrado sus siete columnas;

Mateo 13:44

¶El reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo; el que un hombre halló, y lo encubrió, y por el gozo de su hallazgo, va, y vende todo cuanto tiene, y compra aquel campo.

Lucas 2:19

María empero guardaba todas estas cosas, confiriéndolas en su corazón.

Lucas 2:51

Y descendiendo con ellos, vino a Nazaret; y les estaba sujeto. Y su madre guardaba todos estos dichos suyos en su corazón.

Lucas 9:44

Penetren estas palabras en vuestros oídos: porque el Hijo del hombre va a ser entregado en mano de los hombres.

Deuteronomio 30:13

Ni está más allá del mar, para que digas: ¿Quién pasará por nosotros la mar, y nos lo traerá, y nos hará oírlo, para que lo cumplamos?

1 Timoteo 1:15

Fiel es este dicho, y digno de ser recibido de todos, que Cristo Jesús  vino al mundo para salvar a los pecadores; de los cuales yo soy el primero.