sin embargo, en tus abundantes compasiones no los abandonaste en el desierto: la columna de nube no quitaste de sobre ellos de día, para conducirlos en el camino, ni la columna de fuego de noche, para alumbrarles en el camino que hubieron de andar.
Porque la nube de Jehová permanecía sobre la Habitación de día, y de noche había fuego en la nube, a la vista de toda la casa de Israel, en todas sus jornadas.
es a saber, que Dios estaba en Cristo, reconciliando consigo mismo al mundo, no imputando a los hombres sus transgresiones; y a nosotros nos ha encomendado la palabra de la reconciliación.
que iba delante de vosotros en el camino, a reconoceros lugar donde hubieseis de acampar, en una columna de fuego de noche, para haceros ver el camino por donde hubieseis de andar, y en una nube de día.
Y oí una gran voz procedente del cielo, que decía: ¡He aquí el tabernáculo de Dios está con los hombres, y él habitará con ellos, y ellos serán pueblos suyos, y el mismo Dios con ellos estará, como Dios suyo!