¶Luego saldrá al altar que está delante de Jehová, y hará expiación por él. A este efecto, tomará de la sangre del novillo y de la sangre del macho cabrío, y la pondrá sobre los cuernos del altar al rededor.
Pues lo que no pudo la ley, según estaba debilitada por medio de la carne, lo hizo Dios, el cual, envió a su Hijo en semejanza de nuestra carne pecaminosa, y como ofrenda por el pecado, condenó el pecado en la carne de él: