¡Sírvante pueblos, y póstrense delante de ti naciones: seas señor de tus hermanos, e inclínense a ti los hijos de tu madre! ¡Los que te maldijeren sean malditos, y benditos los que te bendijeren!
Y puso guarniciones en Edom; por todo el Edom puso guarniciones; y todos los Idumeos vinieron a ser siervos de David. Así Jehová daba victoria a David dondequiera que iba.
Porque había acontecido que estando David en Edom, cuando subió Joab, jefe del ejército, para enterrar los muertos, (después de haber herido a todos los varones de Edom;
¿QUIÉN es éste que viene de Edom, con ropas teñidas, desde Bozra; éste tan magnífico en su traje, caminando majestuosamente en la grandeza de su poder? ¡Yo, que hablo en justicia, poderoso para salvar!
En aquel día levantaré el tabernáculo de David, ya caído, y cerraré sus quiebras, y levantaré sus muros; y lo volveré a edificar como en los días de la antigüedad;