Porque Hesbón era la ciudad de Sehón, rey amorreo, el cual había peleado contra el anterior rey de Moab, y había quitado de su mano toda su tierra hasta el Arnón.
tu cuello como una torre de marfil; tus ojos como los estanques de Hesbón, junto a la puerta de Batrabbim; tu nariz como la torre del Líbano, que mira hacia Damasco.
No hay ya más alabanza de Moab; en Hesbón sus adversarios han tramado el mal contra él; dicen: ¡Venid, cortémosle para que no sea más nación! Tú también, oh Madmena, serás reducida a silencio; la espada te perseguirá.
A la sombra de Hesbón se detienen los fugitivos, por falta de fuerzas; mas el fuego sale de Hesbón, y llamas de en medio de Sehón, que devora la región de Moab, y la corona de la cabeza de los hijos de tumulto.
Y fué señalado el territorio de ellos desde Aroer, que está sobre la ribera del torrente Arnón y la ciudad que está en medio del valle adyacente, y abarcaba toda la Mesa contigua a Medeba;
Y fué el territorio de ellos Jazer con todas las ciudades de Galaad, y la mitad de la tierra de los hijos de Ammón, hasta Aroer, que está frente a Rabbá;
Mientras tanto ha habitado Israel en Hesbón y sus aldeas, y en Aroer y sus aldeas, y en todas las ciudades que hay a las riberas del Arnón, por espacio de trescientos años; ¿y por qué no las habéis recobrado en ese tiempo?