¶Mas Jehová respondió a Moisés: Si su padre le hubiera apenas escupido en la cara, ¿no se avergonzaría ella por siete días? Sea excluída del campamento por siete días, y después sea recogida.
Y Jehová hirió al rey, de manera que fué leproso hasta el día de su muerte, y habitaba en una enfermería; mientras tanto Joatam, hijo del rey, tenía el cargo del palacio, juzgando al pueblo de la tierra.
¶Mas si la mancha lustrosa fuere blanca en la piel de su carne, y pareciere no estar más hundida que la piel, ni el pelo se hubiese vuelto blanco, el sacerdote hará encerrar al llagado por siete días.
Entonces aquel que se purifica lavará sus vestidos, y se raerá todo el pelo, y se lavará con agua, y quedará limpio: y después de esto podrá entrar en el campamento; mas habitará fuera de su tienda siete días.
su cuñada se acercará a él, en presencia de los ancianos, y le quitará el calzado del pie, y le escupirá en la cara, y responderá, diciendo: ¡Así y así se ha de hacer al hombre que no quiere edificar la casa de su hermano!
Además, nosotros hemos tenido nuestros padres naturales, los cuales nos han castigado, y los reverenciábamos: ¿no nos hemos de someter pues con mucha más razón al Padre de los espíritus, y vivir?