Y sus padres quedaron asombrados, mas él les mandó que a nadie dijesen lo que había sucedido.
Y le dijo Jesús: Mira, no lo digas a nadie, sino vé, muéstrate al sacerdote, y presenta la ofrenda que mandó Moisés, para que les conste.
Mas Jesús les mandó rigurosamente, diciendo: Mirad que nadie lo sepa.
Y le mandó que no lo dijese a nadie; sino vé (le dijo), muéstrate al sacerdote, y ofrece por tu purificación, conforme mandó Moisés, para que les conste.
Y volvió el espíritu de ella, y al instante se levantó. Y él mandó que le diesen de comer a la niña.