Los atalayas de Israel son ciegos todos ellos; nada saben; todos ellos son perros mudos; no pueden ladrar; soñadores, echados en tierra, amantes del sueño.
¿Acaso se avergüenzan cuando cometen abominaciones? no por cierto, que en nada se avergüenzan, ni aun saben ruborizarse; por tanto caerán entre los que caen; al tiempo que yo los visite, serán derribados, dice Jehová.
¿Acaso se avergüenzan cuando cometen abominaciones? No por cierto, que en nada se avergüenzan, ni aun saben ruborizarse: por tanto caerán entre los que caen; al tiempo que sean visitados serán derribados, dice Jehová.