Porque de la manera que Jonás estuvo en el vientre del gran pez por tres días y tres noches, así el Hijo del hombre estará tres días y tres noches en el corazón de la tierra.
¶Desde aquel tiempo comenzó Jesús a manifestar a sus discípulos que le era necesario ir a Jerusalem, y padecer muchas cosas de los ancianos, y de los jefes de los sacerdotes, y de los escribas, y ser muerto, y al tercer día ser resucitado.
Pero él les dice: ¡No os asustéis! buscáis a Jesús, el Nazareno, el cual fué crucificado: ha resucitado; no está aquí; mirad el lugar donde le pusieron.
Y comenzó a enseñarles que era menester que el Hijo del hombre padeciese muchas cosas, y fuese desechado por los ancianos, y los jefes de los sacerdotes, y los escribas, y que fuese muerto, y que resucitase después de tres días.
diciendo: Es menester que el Hijo del hombre padezca muchas cosas, y sea desechado por los ancianos y los jefes de los sacerdotes y los escribas, y sea muerto, y que resucite al tercer día.